Hace poco pude leer un articulo de un importante empresario donde hablaba de su paso por la tecnologia, sus bondades y virtudes en el mundo globalizado de hoy. sin embargo me llamó mucho la atención, ver el grado de apego de tal individuo hacia su celular, no lo quizo llamar "adicción" porque como lo manifestó tiene la capacidad de desconectarse por varias horas durante el dia para descansar.
La sorpresa fue cuando realizó su viaje de negocios al exterior y quedó sin servicio de celular por varios dias, el pánico se apoderó de el y manifestó además que hasta llegó a sudar, cuando en una convencion dentro de esa agenda no pudo hacer uso de su buzon de correo, ni llamar a su jefe, ni mucho menos conectarse a la red, se sintó el hombre mas insignificante de este mundo, a pesar de que el hotel donde se hallaba le permitía un acceso adicional por unos cuantos dólares, lo que en realidad rechazó pues lo tomaba como un reto personal el poder superar la barrera de esta "adicción".
la alegría fue enorme cuando pudo recibir el primer correo de su jefe, pero 3 dias después, "me volvió el alma al cuerpo", y es que definitivamente en el mundo de los negocios ya todo se realiza con el uso de las tecnologías, transacciones bancarias, servicios, compras, etc.
Lo importante de todo esto es poder determinar en que grado estamos sometidos o apegados a estos aparatos, nos han separado de la familia? le ha causado problemas en su trabajo o por el contrario le han servido como herramienta o podido despegarse por una hora como minimo durante el día?
Ojalá que sí, significaría un gran avance en las relaciones hombre-tecnologia y sociedad, no permita que la SOCIEDAD DE CONSUMO lo asfixie, racionalice su uso y disfrute de la mejor red LA FAMILIAR.
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